Cambiar a contenido. | Saltar a navegación

Puente Estaiada, Metro Línea 4, RJ, Brasil

04/12/2015
Dentro del plan de infraestructuras previsto para los Juegos Olímpicos de 2016, la Línea 4 del metro con 16 km conectará la ciudad de oeste a sur. Además de aliviar el tráfico permitirá trasladar a 300.000 pasajeros al día y reducirá el trayecto de 2 horas a solo 15 minutos. Es la primera vez que se emplea en América Latina un sistema autotrepante en los pilonos inclinados de un puente atirantado.

Dentro de las actuaciones que se están llevando a cabo, una de las obras más importantes en cuanto al desafío y dimensiones, es la construcción de un puente atirantado de 72 m de altura y 320 m de largo. 

El pilono con una inclinación de 23º sobre la vertical consta de dos pilas simétricas y huecas unidas a varias alturas entre sí y variables en las cuatro caras. Para la construcción de estos pilonos, se ha empleado el sistema autotrepante ATR capaz de realizar estructuras verticales sin la necesidad de grúa.

El sistema ATR era el idóneo, por su agilidad y productividad, dada la geometría del pilono ya que cada una de las pilas tenía una inclinación diferente, 25 y 21 grados respectivamente. La solución que ha planteado el equipo de ingeniería de ULMA ha consistido en incorporar a las consolas de autotrepado de las caras inclinadas cerchas MK  y sobre ellas, apoyadas otro par de cerchas en las otras dos caras laterales. Así las 4 cerchas han creado un anillo alrededor del pilono, con plataformas de trabajo que se han elevado a través de los equipos hidráulicos ubicados en las consolas trepantes. El diseño de esta estructura ha permitido adaptarse a la sección cambiante de la pila en cada tongada sin la necesidad de desmontaje.

El sistema autotrepante ATR combinado con encofrado de vigas ENKOFORM VMK ha permitido mover el conjunto de forma sucesiva en fases de 4 m. Tras 19 tongadas, una por semana, el proyecto quedó concluido. 

Con el autotrepante ATR se han mantenido: los más altos estándares de seguridad para trabajadores y equipos, incluso con vientos de 72 km/h, la agilidad en el proceso constructivo así como, inalterable el tránsito de peatones y vehículos durante la construcción.

Para la ejecución de un tramo del tablero que debía salvar una vía de tráfico transitada así como el requerido galibo, no era posible  colocar el encofrado sobre perfiles metálicos. De ahí que el equipo técnico de ULMA planteara la solución de colgar un encofrado de 24 cm de espesor sobre una estructura de  cerchas MK con una distancia de 20 m entre apoyos.